Desde el Instituto Somos Valencia queremos ofrecerte algunos consejos para afrontar la hipocondría en tu día a día que pueden serte de gran ayuda para dejarla a un lado y que no interfiera en tu rutina. Tal y como ya sabrás, la hipocondría consiste en la obsesión de una persona respecto a su propia salud. Bajo ella, siempre encuentra síntomas por los que sentir que está enfermo o bien piensa que algún mal inminente relacionado con la salud está apunto de sucederle. Píde cita con tu Psicólogo en Valencia si quieres solucionarlo de forma efectiva.
1.- Aprende a identificar tus propias sensaciones y su origen
El primer paso de todos consiste en hacernos conscientes de cuál es el origen de ese malestar que asociamos a una enfermedad. Para afrontar la hipocondría, lo primero que debemos saber es que nuestra sensación de malestar no se debe a una enfermedad, sino más bien a nuestros propios miedos y a la propia ansiedad que nos está causando precisamente la hipocondría.
De esa manera, debemos hacernos a la idea de que nuestro malestar no tiene su origen en la enfermedad, sino precisamente en nuestros miedos a estar enfermos. Siempre hay que pensar que padecer una enfermedad es solo una opción, pero no la única.
Es decir, una persona que padece de hipocondría tiende a pensar que la explicación para su propio malestar es siempre la de una enfermedad crónica o incurable. Sin embargo, el malestar puede deberse a literalmente decenas de causas, de las que una enfermedad es solo una de ellas. Por lo mismo, la propia hipocondría sería de hecho la causa más posible para dicho malestar.
Así pues, el primer paso consiste en hacerse a la idea de lo que padecemos y de lo que nos hace pensar lo que pensamos en ese momento. Con ello, debemos hacernos a la idea de que dichas sensaciones, que son muy desagradables, no pasarán a nada físico importante. Es un proceso estrictamente psicológico que está repercutiendo en nuestro malestar físico, pero nada más.
2.- Céntrate en el momento
Tal y como hemos dicho, el estado de angustia producido por la hipocondría tiene su origen en nuestros propios pensamientos y miedos. Es así que como respuesta a ello debemos centrarnos más bien en nuestro propio presente. En efecto, es mucho mejor que pensemos dónde estamos y el momento en el que nos encontramos, sabiendo que se pasará el malestar en poco tiempo, que no es nada permanente y que no responde a algo definitivo ni grave.
Son únicamente emociones negativas, y como tal pasarán. Puedes decirte a ti mismo que nada te ocurre, que dicha sensación pasará. Otra alternativa consiste en pensar en algo que distraiga nuestros pensamientos y que nos requiera un esfuerzo de concentración por el que nosotros mismos encaucemos nuestros pensamientos.
De hecho, es muy positivo pensar en las cosas buenas que vamos a hacer cuando pase dicha sensación. Ver una película, comprarnos algo de comer que nos guste o llamar a un ser querido, entre otras. Bajo esta premisa, también puedes pensar en qué te gustaría cambiar en tu vida: algo a lo que podemos ayudarte como psicólogos profesionales.
3.- No investigues por tu cuenta
Uno de los comportamientos más nocivos para las personas que sufren de hipocondría consiste en buscar (sobre todo por Internet) información acerca de enfermedades, síntomas, etc. Tal y como hemos dicho, normalmente determinados síntomas pueden responder simplemente a tu propia ansiedad.
Desde ese punto de vista, el buscar en Internet posibles causas para lo que te ocurre contribuirá a que te pongas en la peor condición. Hazte a la idea de que no te ayuda porque, ni tienes la enfermedad que sospechas ni te va a ayudar pensar que la tienes.
Esperamos que estas pautas te sirvan de ayuda para sobrellevar mejor tus pensamientos relacionados con la hipocondría. Tal y como hemos dicho, podemos atenderte a través de consulta online. Ponte siempre en las manos de los mejores profesionales: Instituto Somos Valencia ha ayudado ya a un gran número de pacientes con hipocondría a sentirse mejor. Date la oportunidad de ser el siguiente.